VALORACIÓN DE LA SITUACIÓN ACTUAL EN LA COMUNIDAD VALENCIANA
Estimado Asociado,
Como sabe, las chinches de cama es una plaga que ha resurgido con fuerza a nivel mundial en los últimos años, y que está afectando en mayor o menor medida al sector del alojamiento turístico.
Pese a que el impacto de esta plaga en la salud pública no es relevante (la plaga no trasmite enfermedades, y se limita a las molestias propias de las picaduras o, en su caso, a reacciones alérgicas), la aversión y rechazo que produce en la sociedad esta plaga puede provocar un gran impacto reputacional en los establecimientos afectados si no se gestionan adecuadamente.
Dicho esto, desde HOSBEC consideramos conveniente llevar a cabo un estudio del impacto que está teniendo esta plaga en los hoteles y alojamientos turísticos de la Comunidad Valenciana.
Tener una información más precisa sobre el número de casos detectados, así como las áreas geográficas, tipología de establecimientos y origen de clientes más afectados permitirá definir políticas preventivas más efectivas y coordinadas en la lucha contra esta plaga.
Por tanto, solicitamos que participen en esta encuesta totalmente anónima sobre la experiencia que su establecimiento haya podido tener en relación con esta plaga.
MEDIDAS BÁSICAS EN LA PREVENCIÓN Y GESTIÓN DE CASOS DE CHINCHES DE LA CAMA EN ALOJAMIENTOS TURÍSTICOS
En la actualidad existen diversas guías con una amplia información sobre la prevención y gestión de esta plaga en alojamientos turísticos. Desde HOSBEC recomendamos las siguientes, que pueden descargar para su consulta:
No obstante, de manera muy resumida a continuación les facilitamos una serie de medidas para prevenir la extensión de plaga en los establecimientos (la entrada de la plaga no va a poder evitarse ya que es introducida por los propios clientes), así como la gestión de los casos una vez se produzca.
Medidas o consejos para prevenir o limitar la extensión de la plaga
Detección precoz de la infestación.
Lo más frecuente es que la plaga se detecte por el aviso de los clientes que se hayan podido ver afectados (picaduras), pero en algunos casos puede ser detectado por las camareras de piso sin aviso previo de clientes. Para ello es fundamental que este personal disponga de la formación adecuada en la detección de la plaga, y unas pautas establecidas para su vigilancia en habitaciones.
Rápida y eficaz intervención ante la detección de la plaga.
Este factor es clave para contener la instalación, y todos los establecimientos deberían disponer un protocolo claro de actuación ante su detección. Dado que los tratamientos de erradicación van a tener que ser ejecutados por una empresa profesional en control de plagas, debería ser ésta quien facilite estos protocolos. No obstante, como normas básicas hay que considerar:
Si hay que reubicar clientes, realizar una inspección exhaustiva del equipaje (bajo su consentimiento) y someter la nueva habitación igualmente a vigilancia exhaustiva durante los siguientes días.
Otra opción es someter el equipaje a tratamiento preventivo (lavado en calor o seco), a cargo del establecimiento, y realizar un tratamiento preventivo de la habitación reubicada tras su salida.
Bloquear la habitación afectada y avisar lo más rápido posible a la empresa de control de plagas especializada, evitando la entrada a ninguna persona salvo los profesionales.
No retirar ningún mobiliario ni ropa de la habitación
No aplicar sprays o insecticidas domésticos – generan un efecto ahuyentador que potencia la extensión de la plaga
Gestión de quejas / denuncias de clientes por picaduras o detección de chinches
La gestión de quejas relacionas con chinches de la cama es una tarea compleja. Se debe entender el trastorno e impacto que dicha plaga puede provocar en el cliente afectado, y una mala gestión de la situación puede derivar en que se interponga denuncia a las autoridades sanitarias / turísticas vía hoja de reclamaciones y/o que se denuncie públicamente a través de redes sociales.
Por tanto, es fundamental que la gestión sea la adecuada para que “la sangre no llegue al río”. Aunque no hay fórmulas mágicas en este terreno, algunas recomendaciones pueden ser:
Asumir nuestra responsabilidad ante el cliente. Se puede explicar la problemática si el cliente es receptivo, pero no intentar eludir responsabilidades.
Asignar a una persona para la gestión de estas situaciones que esté adecuadamente formada en la gestión de esta plaga y con las habilidades comunicativas pertinentes.
Gestionar la situación de manera urgente pero discreta.
Ofrecer atención médica si se requiere
Ofrecer cambio de habitación (con revisión o lavado de equipaje tras su consentimiento)
Realizar un seguimiento de la queja – mantener informado al cliente sobre la situación, y preocuparse por su estado
Vigilar la aparición de comentarios y quejas en redes sociales, y contestarlas de la manera más rápida, educada y profesional posible.
Desde HOSBEC agradecemos su colaboración y quedamos a su disposición para atender cuantas dudas puedan surgir al respecto